jueves, 5 de diciembre de 2013

No sé de sorbos, sé de extremos, 
sé que nos tocamos menos, 
que ya no saltan chispas cuando nos vemos, 
que me cuesta acercarme y que estás distante, 
tú que siempre has sido mi confidente y amante,
mi perfecto guante, ¿por qué mierda se difumina el afecto? 
¿qué nos ha pasado en el trayecto? 
nuestras bases sólidas hoy están afónicas, 
mientras cual será la próxima bronca, no hay arquitecto 
capaz de sustentar lo nuestro si hay grietas en el cemento. 

Lluvia en el cristal, hojas marchitas, 
mis noches malditas, mierdas gratuitas, 
mientras tú más fuerte me gritas, 
portazos, tú en la habitación ¿cómo puedo no consolarte? dejarte a solas, 
orgullo, enfado no habían entrado aquí hasta ahora. 
¿Desde cuándo he necesitado espacio? ¿o tú? 
si llenas mi vacío bable, mis reacios al tabú, 
nos hace falta tanta o más que un guiño, 
¿por qué nos falta aliño? no entiendo mi cielo, mi amor, mi cariño... 

Mi luna y mis estrellas, así te conozco, 
todo empieza a ser más tosco más a menudo, 
tú dudas, yo dudo, si desde que te vi he sido tuyo, 
intuyo que te vas ha marchar, mi corazón esta mudo, desudo, tirado en el felpudo, 
lo arreglamos, sonríes, mis pies vuelan, 
segundos contigo son rubíes más que Saudíes tengan, 
así es, venga, juntos podemos con todo, 
pero después de un corto periodo algo en el aire sienta incómodo. 
Yo cada vez más lejos, tú cada vez más triste, 
nuestro lazo cada vez más viejo, siento lo mucho que sufriste, 
fue un despiste, tienes que creerme... 
(Otoño) Finales de septiembre... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario